Correr es de cobardes, qué aburrido es correr, correr es malo, ¿te levantas un domingo a las 7 de la mañana para ir a correr? y un largo etcéteras son las frases típicas que escucho cuando le cuentas a alguien que vas a correr. Sin embargo, este deporte cada día tiene más adeptos y puedes encontrarte gente corriendo a cualquier hora del día y en cualquier lugar, ¡por lo que somos muchos los cobardes que corremos!
La historia de cada corredor o “runner” como algunos nos llaman es diferente, unos corren porque es saludable, otros por quitarse kilos de más y otros simplemente porque les gusta. Yo personalmente corro porque me hace desconectar del frenético día a día que llevamos, porque me siento bien después de correr y lo más importante porque me encanta el ambiente que hay detrás de este deporte.
El día que tengo una carrera, no sólo tengo que madrugar casi más que para ir a trabajar, sino que además tengo que acostarme pronto o incluso de dejar de hacer planes para poder descansar y comer bien. En la salida el ambiente es de nervios, de concentración, de risas y durante el recorrido hay momentos de sufrimiento en los que yo incluso he llegado a pensar ¿qué hago aquí?, pero todo ello compensa con la inmensa satisfacción que sientes al entrar en meta.
En Madrid puedes encontrarte carreras populares casi todos los fines de semana del año: desde la “Rock´n Roll Madrid” que se celebra en el mes de abril y donde el mismo día los corredores tienen tres distancias para disfrutar (10K, Media Maratón y la mítica y tan dura Maratón de Madrid), pasando por la carrera del Barrio de Canillejas, conocida como “Trofeo José Cano” que en este 2018 celebrará su 38ª Edición, “Madrid Corre por Madrid” donde los corredores pueden recorrer las calles más emblemáticas de Madrid, hasta la tan mundialmente conocida y considerada como la mejor carrera de 10K de España, la “San Silvestre Vallecana” que se celebra el 31 de diciembre y donde cada año son más los corredores que se inscriben. Podría hablar de muchas más, pero estaríamos horas.
Una de las virtudes de este deporte es que no se compite contra nadie, sino que cada uno compite contra sí mismo y no necesitas nada más que unas zapatillas ¿A qué esperar para unirte a los runners? Como diría Chema Martínez, ¡No pienses, corre!