La violencia de género sigue siendo un problema grave, y el asunto empeora cuando a través de las nuevas tecnologías, el acoso se extiende más allá del ámbito privado, convirtiéndose en un escaparate difícil de controlar. Por eso, es preciso conocer qué se puede hacer ante situaciones de ciberacoso, analizando también la diferencia entre el “stalking” y el “sexting”